Empezamos este precioso e histórico itinerario en la playa del Mascarat, donde podemos alquilar nuestro kayak. Bordeamos la punta del Mascarat, dejando a nuestra izquierda la enorme y alucinante pared de acantilados, que forma desde paredes verticales prácticamente lisas a espectaculares cavidades y arcos formados por la roca, para llegar a la primera parada, la cala del Racó del Corb.
La cala del Racó del Corb, conocida también como cala el Collao, es una de las calas más bonitas y escondidas de la Comunidad Valenciana, un rincón casi virgen de Calp con unas aguas turquesas cristalinas. Esta cala se encuentra justamente en la línea divisoria entre los términos municipales de Altea y Calp, en el racó (rincón) que forman los acantilados del Morro del Toix en su vertiente sur.
En este punto bajaremos del kayak para ponernos las gafas y el tubo y adentrarnos en el agua para disfrutar del maravilloso fondo marino. Cuando nos bañemos en la cala del Racó del Corb, lo estaremos haciendo en aguas protegidas por ley, puesto que forman parte del parque natural de la sierra Gelada.
Durante el trayecto, podremos apreciar en estas paredes de piedra la existencia de varias pesqueras antiguas. Estas construcciones servían de atalayas y eran utilizadas por los pescadores para conseguir subir por el acantilado y poder así esperar mientras conseguían recoger una buena cantidad de peces. Esta era una buena forma para no tener que ir hasta la costa y volver el día siguiente por la pesca, ahorrando tiempo y energía. Se pueden ver desde el mar elementos como cuerdas y escaleras e incluso parte de los antiguos refugios. De hecho, estas pesqueras se encuentran también en diferentes puntos de la costa de la Marina Alta.
Además, lo largo del recorrido se pueden observar diferentes cuevas.
- Distancia: 1,75 km.
- Desnivel positivo: 1 m.
- Desnivel negativo: 1 m.
- Altitud máxima: 0 m.
- Trailrank: 1.
- Altitud mínima: 0 m.
- Tipo de ruta: solo ida.