A los pies del peñón de Ifac, donde comienza la senda, encontramos la cala el Racó, preciosa playa de cantos rodados, muy próxima al Real Club Náutico de Calp. 

Una vez en la cala, en su extremo izquierdo habrá una serie de boyas: ahí es donde se encuentra la senda submarina, que tiene unos 120 metros de longitud, y cuenta con cinco paneles acuáticos informativos situados a, aproximadamente, un metro de profundidad. 

Entrando desde la playa y siguiendo la pared de la izquierda, rumbo aproximado de 180º, encontraremos un fondo poco profundo en el que abundan las rocas a un lado y las praderas de posidonia a la derecha. Se trata de una planta acuática (no es un alga) característica del mar Mediterráneo. Es fundamental para la preservación de los ecosistemas marinos y de nuestras playas, puesto que contribuye a la oxigenación del agua, sirve de refugio, alimento y lugar de parada a numerosos peces, crustáceos y moluscos, y reduce la fuerza de las olas sobre la playa. 

Entre estas praderas de posidonia encontraremos un claro por donde debemos seguir desviándonos hacia la derecha. En esta dirección se encuentran los restos de un antiguo barco pesquero. 

A lo largo del recorrido submarino, la profundidad máxima que puedes encontrar es de unos cinco metros y medio en la boya más lejana. En toda la extensión de la cala verás multitud de obladas, doncellas, serranos, gobios, castañuelas, tapaculos, salpas, fredis, pepinos de mar, sargos picudos, algún gallo pegado al fondo de arena, y si tienes suerte, algún pulpo, alguna morena y alguna pequeña sepia. Además, con mucha atención, podremos ver bancos de espetones.

• Distancia: 0,14 km
• Desnivel positivo: 1 m
• Desnivel negativo: 1 m
• Altitud máxima: 4 m
• Trailrank: 14
• Altitud mínima: -8 m
• Tipos de ruta: circular