Castell de Castells es el pueblo que cierra la comarca por su parte suroeste, en la zona de interior, acotando con las dos comarcas vecinas, el Comtat con la Vall de Seta por un lado y la Marina Baixa con Tàrbena por el otro. Situado al extremo de la Vall de Pop, se encuentra a 551 metros de altitud, con una superficie montañosa muy extensa de 45,9 km² y 425 habitantes conocidos como castellencos y castellencas.
HISTORIA
Una población rodeada por todos sus lados de naturaleza, con un relieve montañoso donde abundan los barrancos. Las sierras que delimitan el pueblo de Castell de Castells son el Alfaro y la Serrella y por el suroeste las estribaciones de la Xortà, que llegan a los 1.088 metros. Drenan el término diferentes barrancos, como el de Galisteo, Moliners, Foies, Xorquet, Castellet, y otros, que van en dirección a Castell de Castells, y se unen al riachuelo de Castells para después convertirse en el río Gorgos. Junto a uno de esos barrancos se descubrieron pinturas rupestres declaradas patrimonio de la humanidad. Es considerado uno de los santuarios neolíticos más importantes de la Península: el Santuario de Petracos. Estas representaciones sitúan Castell de Castells en la prehistoria, a unos 8.000 años de antigüedad. Aun así, la población tiene su origen en el antiguo castillo de Serrella, por lo cual también es conocido como Castell de Serrella. Formaba parte de los dominios de al-Azraq (1208-1276) hasta 1254, cuando Jaime I (1208-1276) lo incorporó en la Corona de Aragón.
Bajo la atenta mirada del castillo de la Serrella, otras alquerías musulmanas llenaban el término actual: Aialt, Bitla (o Vila) y L'Alcúdia de Castell (núcleo actual). Aunque otros autores también apuntan a Petracos como un núcleo diseminado, parece que este es posterior. En tiempo del patriarca Ribera, el 1574, L'Alcúdia contaba con 35 casas, Aialt con 30 y Vila con 8 casas, todas ellas de familias cristianas nuevas (o familias moriscas). En la actualidad restan como despobladas y residualmente en la toponimia local.
Fue una rectoría morisca con 170 casas en el momento de la expulsión, a la que se opusieron por las armas y fueron derrotados definitivamente después de destruir la iglesia en la batalla del Pla de Petracos. La posterior repoblación se hizo con cristianos mallorquines, como podemos observar con la continuidad de linajes con los apellidos Estalrich, Mesquida, Pasqual, Tomb, etc.
La economía es básicamente agrícola, de secano: almendra, oliva y algarroba. Destaca su almazara cooperativa en la que el vecindario realiza la prensada de forma colectiva para el autoconsumo familiar.
Otro colectivo muy arraigado e idiosincrásico de Castell de Castells es su banda musical con más de 100 años de historia.
FIESTAS
- Por enero se celebra Sant Antoni con la hoguera y barbacoa tradicional a cargo de los festeros de Sant Antoni.
- La fiesta en honor a la patrona, santa Ana, se celebra los días 25 y 26 de julio.
- Las fiestas patronales se celebran del 15 al 18 de agosto.
- La fiesta de la partida de Petracos se celebra los días 7 y 8 de septiembre.
GASTRONOMÍA
- Los minxos amb farinetes i borra es uno de los platos más típicos de la zona y uno de los que más representa a Castell de Castells. Son cocas preparadas a base de agua, sal, aceite, harina y una salsa con verduras.
- El puchero es uno de los platos de cuchara por excelencia de Castell de Castells. Junto con el arroz con conejo y caracoles hacen una buena muestra de la cocina de montaña y de caza.
- La borreta de melva es un plato muy apreciado en toda la zona, preparado con bonito seco, cocido a fuego lento y complementado también por productos autóctonos.